Empezamos nuevo año, y en una de las muchas estadísticas de final de año se publicó la bajada brutal de audiencia de RTVE la radio televisión pública española, que ha hecho pasar a TVE del primer al tercer puesto en audiencia y que RNE pierda mas de un 20% en unos meses, la última parte del año, desde que se aplicó el rodillo y cambio de todo el organigrama directivo y de profesionales que trabajaban desde hacía años en el ente público. Cambio de línea editorial y de permitir la libertad y la calidad de la televisión pública que se había ganado en los 4 o 5 últimos años prestigio y veracidad tanto fuera como dentro del país y que se ha esfumado como el crédito y prestigio de España. Una radio televisión pública al servicio del partido del poder como hacía 10 años que pasó.
La gente, la ciudadanía, se da cuenta de cuando se quiere manejar y cohartar la libertad de expresión y cuando quieren engañarla. Como muestra la pérdida muy acelerada de audiencia de RTVE. Entonces yo me pregunto, ¿cómo puede pasar que ganen las elecciones y no pierdan votos los dirigentes que engañan, que son corruptos, que no cumplen lo prometido en campaña, los que van contra los servicios públicos mas básicos? Puede ser que la gente lo sepa, pero que le de igual y no haga nada para remediarlo, es algo incomprensible, que se permita mentir, estafar, robar, esquilmar y privatizar entregando a sus amigos servicios esenciales y que siempre deben ser públicos...etc a la clase política y se les siga apoyando con los mismos números de votos y porcentajes de apoyo.
Si como ciudadanía nos damos cuenta de lo esencial y no hacemos nada por cambiarlo, o si sólo nos damos cuenta de lo accesorio y no le prestamos atención a lo esencial, éste país como sociedad igualitaria y próspera está acabado.
Y así empezamos un año nuevo, en el que planean nuevos recortes, subidas de impuestos, mas paro y mas recesión. Todo ello para que junto con otros países de la zona euro, hagamos de parapeto y rehenes de la locomotora europea, que sigue aprovechando que los focos no están sobre ella para remodelar su economía, su sociedad, su sistema energético, sanitario, financiero etc a coste menos que cero y sin mucha atención exterior que pueda entorpecer y molestar. Así que las cosas no pintan bien para los rehenes, pero quien sabe lo que deparará el futuro, en las películas por lo menos siempre suelen pillar al secuestrador, aunque también suelen morir alguno de los retenidos, normalmente los mas feos e insignificantes, veremos.
